El jengibre es una planta con numerosas ventajas medicinales que se encuentran constantemente, y ¿qué mejor que tener un poco en casa?
Por ello, te explicamos cómo cultivar jengibre nuevo en una maceta pequeña para que puedas tenerlo siempre a mano y disfrutar de sus ventajas. Tambien te puede interesar leer: Como cultivar tomillo
El método más eficaz para cultivar jengibre en casa
Antes de empezar el ciclo, debes saber que el jengibre se planta a partir de su rizoma o raíz.
Para obtener la raíz del jengibre, sólo tienes que coger un trozo de la nueva planta y dejarlo en un vaso de agua durante unas 4 horas. Transcurrido ese tiempo, elimine el trozo de jengibre y colóquelo sobre papel permeable para eliminar la sobreabundancia de humedad y métalo en un paquete de plástico intentando eliminar la sobreabundancia de aire. Por último, envolver el jengibre y el paquete con una tela. Espere una semana y compruebe si la planta ha crecido.
Raíces de jengibre
Qué necesitarás
Un trozo de raíz de jengibre nueva
Una maceta ancha de 40 o 45 centímetros
Tierra y abono de lombriz en una proporción de 3 secciones de estiércol por 1 de humus.
Piedras para colocar en la parte inferior de la maceta.
Estrategia
Coloca las piedras en la parte inferior de la maceta para lograr una filtración generalmente excelente. Pon la tierra en la maceta asegurándote, suponiendo que tengas unos cuantos trozos para plantar, de que hay espacio suficiente entre cada uno de ellos.
Coloca la raíz sobre la tierra y cúbrela con el humus justo (dejando al descubierto unos pocos brotes).
Riega la tierra sin que el agua entre en contacto con los trocitos de jengibre. Al cabo de 3 o 4 meses podrás recoger algunos trocitos de raíz. Sólo tienes que escurrir un poco la tierra hasta que encuentres un trocito de raíz. En el momento en que hayas cortado el trozo, vuelve a cubrir el rizoma con tierra para que la planta pueda seguir desarrollándose.
Cuidados de la planta
Es fundamental que la maceta donde establezcas el nuevo jengibre no reciba la luz del día de forma inmediata. En un mundo perfecto, debería estar en un lugar semioculto.
Tampoco es bueno cultivarla en el interior, ya que necesita una temperatura no superior a 21 grados ni inferior a 10 grados.
Teniendo todo esto en cuenta, la planta debería en un mundo perfecto recibir poca agua pero normal.